El águila pescadora "Urdaibai" ha dejado de emitir señales de satélite.

Después de un año siguiendo sus aventuras por tierras africanas, el emisor satelital del águila pescadora Urdaibai, una de las liberadas el pasado año, ha dejado de enviarnos información, por lo que ya no podemos conocer su localización ni sus movimientos.

Recordamos que es una de las aves que más sorpresas nos ha dado a lo largo del año. Sus primeras semanas en África occidental fueron ya sorprendentes.

Tras llegar al delta del Salum, en Senegal, gran refugio de invernada para miles de aves, recorrió la costa occidental del continente, sobrevolando Senegal, Gambia y Guinea-Bissau. Unos días después, decidió dejar atrás los grandes deltas y sus extensos manglares para retornar por el mismo camino costero, llegando esta vez hasta la ciudad de Dakar, la capital senegalesa. Tras pasar unos primeros días de preocupación, observamos que se había asentado en un humedal en medio de la ciudad que parecía seguro, muy cerca del campo de golf, donde permaneció algo más de 20 días.

Trascurrida esa temporada, a principios de noviembre su inquietud le llevó a la costa al sur de Dakar, conocida como la Petite Côte, y tras unos días volvió a encontrar un sitio seguro en un embarcadero en la región de Thies. Urdaibai pasó allí una larga temporada, en la que Aitor Galarza, director del proyecto, tuvo la oportunidad de viajar al lugar, localizarla, y comprobar que estaba en buen estado, pescaba perfectamente y el sitio era seguro. Podéis leer una pequeña crónica del viaje en la sección Águilas pescadoras.
En primavera nos volvió a sorprender haciendo un viaje de una semana de nuevo hasta Guinea-Bissau, pero volvió a su embarcadero. Ya el 19 de agosto, sus últimas emisiones la situaban en la reserva de Somone en Senegal, un lugar de invernada común para cientos de especies, entre ellas el águila pescadora.

Embarcadero donde Urdaibai pasó una larga temporada. Foto de Aitor Galarza.

Es en estos días cuando su emisor ha dejado de enviarnos señales. Pero no creemos que sea motivo de alarma, dado el lugar en el que se encuentra y que nuestra joven Urdaibai nos ha demostrado ser una gran superviviente.

En cualquier caso, puede que salgamos de dudas el año que viene, cuando las jóvenes rapaces liberadas en verano de 2013 podrían empezar a visitarnos cada año en Urdaibai.

¡La estaremos esperando!